AMLO reconoce sobrecosto en refinería Olmeca de entre 2 a 4 mil millones de dólares

CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció este martes que el costo de la refinería de Dos Bocas sí fue mayor al presupuestado, debido a que en un principio no se contempló el precio de varios equipos necesarios para el funcionamiento de la obra. Sin embargo, negó sanciones para los funcionarios que realizaron el presupuesto.

Cuestionado sobre este tema en la conferencia matutina, el mandatario pidió a los mexicanos estar tranquilos, ya que aunque sí hubo un sobrecosto, no hubo corrupción en el proceso de construcción de la nueva refinería, que procesará 340 mil barriles diarios de petróleo crudo.

“Hubo un incremento en el caso de la refinería porque no se contemplaron originalmente equipos que se necesitan y se amplió el presupuesto. Por ejemplo, no (estuvo) incluido el gasoducto y eso se incluyó”, afirmó AMLO en Palacio Nacional.

“Tienen que estar tranquilos de que nadie hizo negocio para provecho personal en la construcción de la refinería, que no hay corrupción. No es el tiempo de antes, Rocío Nahle es una mujer integra y honesta”, dijo.

Este sobrecosto, de acuerdo al presidente, es de dos a cuatro mil millones de dólares más al estimado en un inicio.

“De todas maneras salió más barata que lo que querían cobrarla empresas extranjeras”, sentenció.

En este contexto, el titular del Ejecutivo afirmó que si se hubiera decidido construir la refinería en estos momentos, su costó sería del doble y que no se terminaría en el mismo tiempo en el que se construyó originalmente.

Asimismo, aseguró que en los próximos días su gobierno informará sobre el costo final de la refinería de Dos Bocas, incluido el presupuesto adicional que se utilizó para construir “otros equipos que no se contemplaron en el costo inicial”.

Finalmente, López Obrador calificó de ‘politiquería’ el informe del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) que señala en las ‘mega-obras’ se han gastado 9 mil millones de pesos sin licitación en empresas “riesgosas”.

“Esas organizaciones eran alcahuetas de los corruptos que dominaban México y ahora ya no reciben moches”, indicó. (Fuente: El Financiero)