Congreso de Morena, imposibilitado a remover a Mario Delgado: Bertha Luján

La salida anticipada de Mario Delgado de la dirigencia nacional de Morena es jurídicamente inviable, aseguró la presidenta del Consejo Nacional, Bertha Luján, quien descartó que el Congreso Nacional que se llevará a cabo en septiembre próximo pueda discutir el relevo previsto para agosto de 2023.

«Tenemos de por medio una sentencia del Tribunal Electoral que nos obliga como partido a atender lo que plantea y esa sentencia tiene que ver con el haber dado a la presidencia y la secretaría general un periodo de tres años y ellos saldrían de acuerdo con la sentencia hasta 2023».

En entrevista, la presidenta del Consejo Nacional de Morena aseguró que hay militantes que pueden estar inconformes con la gestión de la actual dirigencia nacional, pero «deben considerar que no atender el contenido de esta sentencia nos coloca en una situación difícil porque las sentencias del Tribunal Electoral son obligatorias y no hay ningún elemento jurídico para echarla abajo».

De cara a la segunda Convención Nacional de Morena que militantes disidentes llevarán a cabo este domingo en el Monumento a la Revolución, Luján Uranga dijo que «no podemos incumplir una resolución del Tribunal Electoral y eso tendría su costo y por eso hay que decirlo, para no engañarlos. Es un tanto irresponsable plantear las cosas y que las bases se definan, cuando no es así».

Y es que morenistas de todo el país se reunirán por segunda vez para analizar la situación del partido tras las asambleas distritales que, en su opinión, estuvieron plagadas de irregularidades.

«El impresionante caudal de más de mil denuncias que hemos recibido por medio de nuestra plataforma, y también recogido de las redes sociales y los medios de comunicación, demuestran sin la menor duda que las irregularidades fueron generalizadas y presentes en casi la totalidad de los 300 distritos electorales a lo largo y ancho del país».

Además, los organizadores de la convención, entre ellos el académico John Ackerman e Irma Eréndira Sandoval, denunciaron que «hubo sin número de violaciones procesales así como un desorden organizativo mayúsculo de parte de los órganos del partido que pusieron en riesgo la certeza y la legalidad del proceso electoral».